Integrar al padre
Tomar al padre nos abre a la fuerza de la realización profesional.
Con nuestro padre, tomamos toda aquella energía del mundo exterior, es la energía que nos hace ir:
hacia afuera
Hacía el logro de nuestras metas
Hacía los objetivos que nos trazamos en la vida.
Que nos ayuda a poner límites en todos los ámbitos de nuestra vida.
Cuando solo tomamos a nuestra madre, hay soledad y aislamiento.
Cuando tomamos la energía de ambos padres, estamos equilibrando la energía en nuestro interior y a partir de allí es más fácil poder fluir en la vida de manera adecuada, sintiéndonos bien con nosotros mismos.
La energía integrada de ambos padres permite que el éxito profesional fluya en nuestras vidas.
Este éxito está unido a la prosperidad económica.
Tomar a todos como son, significa tomar a:
Los excluidos
Los rechazados
Los perpetradores
Los despreciados
de las dos ramas, que los conozcamos o no. Significa también querer a la gente difícil de nuestra propia vida, a los perpetradores económicos, a los prepotentes, a los tiburones y usureros, etc.
Y agradecerles ser como son.
Un hijo necesita de padre y madre, ya que somos 50% mamá y 50% papá.
A su vez, papá y mamá tienen el 50% de cada uno de sus padres y así todas las generaciones hacia atrás, decir, somos 50% energía masculina y 50% energía femenina.
Cuando una madre excluye al padre, el hijo borra ese 50% que él tiene y lo que es peor, el inconsciente de ese hijo interpreta que tiene un 50% que no sirve o que no es tan bueno y ese hijo lo va a vivir como bloqueos en su vida profesional.
Recordemos una de las leyes de la sistémica familiar es que toda persona tiene derecho a PERTENECER.
Bert Helliger ha sido claro al decir que al padre se le toma a través de la madre, es la madre quien da el permiso para tomar al padre.