UN AÑO COMIENZA

Este año nuevo lo pongo en tus manos, Señor.

Tú, amado Padre, que velas por mí y estás por encima de los límites del tiempo y del espacio,

sabes lo que necesitaré en este año que inicia.

Me abandono a tu misericordia, a tu providencia.

Que sea lo que Tú dispongas, Señor.

Aumenta mi fe,

que sea capaz de descubrir tu presencia en mis semejantes, permíteme permanecer a tu lado,

dame fortaleza y perseverancia en las pruebas,

ayúdame cada día a recordar juntos tú y yo podemos superar cualquier reto.

Líbrame de la indiferencia.

Hazme sensible a las necesidades de los demás,

muéveme no sólo a orar, o interceder por ellos,

sino a realizar acciones concretas en beneficio de los demás.

Ayúdame a a valorar mi tiempo y mis dones.

Enséñame a darme a los demás,

a comprender cuánto vale la pena el servicio.

Enséñame a salir de mí mismo para ir al encuentro de mis hermanos,

sin prejuicios y con el corazón abierto.

Líbrame de la vanidad, de creerme bueno, de sentirme satisfecho.

Elimina la inercia, el conformismo, ponme en movimiento, quiero junto a ti,

construir un planeta donde reine la paz, el amor y la justicia.

Enséñame a mantenerme sencillo y alegre,

a ser verdaderamente testigo tuyo en mi mundo.

Ayúdame a desprenderme de todo lo que me estorba para seguirte,

líbrame de lo que me hace tropezar, de lo que me pesa:

rencor, egoísmo, orgullo, miseria, apego.

Enséñame a ser paciente, comprensivo, dulce,

a perdonar a los otros, a acogerlos en mi corazón.

Enséñame a amar como me amas Tú.

Dame en abundancia todos los recursos materiales para cumplir con mi misión de vida,

salud plena y voluntad firme.

Quiero descubrirte en cada día de este año que empieza,

y ayudar a que otros te descubran también.

Señor, que cuando me busquen a mí,

te encuentren siempre a Ti.

Gracias por enviar tus ángeles a cuidarme en cada instante.

Amén.