Manifiesto pandémico
1. Sólo uso mascarilla cuando entro en lugares públicos porque respeto a las personas que tienen miedo y/o las reglas sociales que “se necesitan” cumplir.
2. No uso guantes, me doy cuenta de que eso es incongruente ya que contamina más al planeta y puede propagar con mayor facilidad cualquier virus. En lugares donde es obligatorio, como en algunos negocios, los utilizo y los tiro en la basura como corresponde. De hecho, junto los desechados que veo volando en los estacionamientos de supermercados.
3. Mantengo distancias sociales porque respeto el espacio personal de los demás, pero no porque le tenga miedo a mis vecinos o co-ciudadanos. De hecho, con gusto abrazaría a alguien en este mismo momento en público si fuera un sentimiento mutuo. Abrazar genera endorfinas que levantan el ánimo y alivian el estrés. Hemos experimentado suficiente estrés durante este período. No nos alejemos.
4. No recibiré ninguna vacuna porque para mí esta no es la solución. Prefiero fortalecer mi sistema inmunológico, mi mente, espíritu y corazón. Tengo claro que cuando surgieron las primeras vacunas para la humanidad, el objetivo de los médicos y científicos era proteger la salud de la población. Hoy en día los laboratorios que desarrollan vacunas están supeditados a instrucciones y negocios farmacéuticos.
5. Sé que seguramente la prueba C0V1D-I9 saldría positiva si tuviera que agregar síntomas de resfriado, lo que aumentaría el número de «nuevos casos» y aumentaría el pánico y con ello el circo que orquestan las autoridades y los medios de comunicación. Me pongo en cuarentena voluntariamente solo para proteger la salud mental y física de mis compañeros y compañeras (Que piensan y no piensan como yo).
6. Me lavo las manos con agua y jabón porque… eso es lo que siempre he hecho, es una norma básica de higiene.
7. Ni el gobierno ni la OMS me obligarán a poner algo en mi cuerpo. No soy una oveja y nadie puede manipularme para creer que el gobierno, los políticos, los expertos y las organizaciones criminales globales financiadas por el sombrío mundo subterráneo están trabajando por mi bien y mi seguridad.
8. No viviré con miedo porque nunca he vivido así y no comenzaré ahora. Nos dijeron confínate, quédate en casa, no te oxígenes, no hagas nada; eso en lugar de aconsejarnos fortalecer el sistema inmunológico, tener contacto con la naturaleza que nos limpia, oxigena y cura.
Así que haré lo que dicte mi propia conciencia sin alterarme por las mentiras y el pánico que algunos necesitan para alimentar la separación.
9. Apagué las noticias y comienzo una investigación independiente (si aún no lo has hecho tú, estas perdiendo tiempo), encuentro esa información que repiten sistemáticamente que no es confiable porque contradice los mandatos de la OMS. La ciber patrulla está al full, hay censura como nunca antes habíamos vivido y se está convirtiendo en la «nueva normalidad».
Descubrirás mucho y te darás cuenta de que te han mentido y manipulado hasta las trancas. Hay que vincular todo lo que se aprende, para comprender de qué va su agenda y sus fases, el multibillonario negocio farmacéutico tiene un plan completo, dividido en fases…
10. Es mucho más difícil hacer esfuerzos de pensamiento crítico para formar la propia visión, la propia percepción (esta va a cambiar a medida que la conectemos con más hechos); Que ser ávidos a dudar y cuestionar a quienes se erigen como los únicos expertos, los POSEEDORES DE TODA LA VERDAD, que nos hacen creer, replicar, obedecer, desear y pedir lo que ese mismo poder quiere, creyendo que fue nuestra propia elección. Dejo de ceder mi criterio y mi poder de decisión a otros.
11. Si estás viendo el mundo bajo la óptica izquierda y derecha, estás cristalizado en ideologías. Utilizan cada lado para fingir que se enfrentan ( y de hecho, lo hacen bastante bien, lo vemos en cómo reaccionan las masas y las distraen). El verdadero poder no tiene ideología.
12. La sabiduría no es acumular conocimiento, sino todo lo contrario. Implica DESAPRENDER todo lo que se nos inoculó para entenderlo desde nuestro corazón, que es el único sabio.
13. La ecología del planeta es la verdadera emergencia de nuestra generación, si no cambiamos el rumbo seremos la causa de la sexta extinción masiva (Con el confinamiento se demostró que somos responsables del calentamiento global)
14. Las manos que ayudan son más sagradas que las que rezan.
Nuestro alimento es el amor, la alegría, el bienestar, la plenitud y la verdad