Cuando alguien se va

Honrar lo que se ha ido

agosto 4, 2020

Honrar lo que se ha ido
Vaya que hemos tenido pérdidas por estos días: de seres queridos, amistades, separaciones de pareja, empleos, negocios, lo que creíamos que era y no es…

Quizá sea necesario hacer una honra para todo lo que creíamos nuestro… Y que finalmente tomó su propio camino, habiéndonos dejado una sensación de abandono o de rechazo o de vergüenza o de injusticia o de traición. Al fin y al cabo, dolor, y en ocasiones, sufrimiento.

El dolor es inherente a la pérdida; el sufrimiento es una elección. Sufrimos cuando las cosas no pasan como nosotros deseamos, o cuando tenemos miedo o cuando fingimos que no pasa nada. En realidad, a todos nos está pasando algo, porque vivir los cambios es también una pérdida. Y cambios hay ahora en todos lados.

El cambio por sí mismo nos genera miedo a no sobrevivir, incertidumbre. Nos saca de nuestro centro y encontrarlo de nuevo se lleva un tiempo. Un tiempo que requiere nuestra atención y sobre todo, amor por nosotros mismos.

Hoy te propongo un ritual para aquello que has perdido y que tal vez, sólo tal vez, requiera honrarse y reconocerse como parte del camino de aprendizaje.

Ritual para honrar lo que se ha ido

Necesitarás:

1. Hojas blancas
2. Pluma
3. Veladora morada
4. Agua
5. Flores (las que te gusten, en la cantidad que quieras)

Escríbele una carta de despedida a la persona o situación, diciéndole cómo te sientes, qué vas a extrañar, qué agradeces, qué te enoja, qué te entristece, qué te hubiera gustado, qué no te gusta… Una vez escrita la carta, léela en voz alta. Respira profundo. Haz consciente en el cuerpo todas las sensaciones. Con esas sensaciones, enciende la veladora. Mientras observas la llama, puedes expresar algunas palabras de despedida o agradecimiento. Después quema la carta y llévala, en cenizas, a la tierra. En un bosque o jardín lejos de casa. Deja como ofrenda un poco de agua rociada sobre la tierra o regando algún árbol. También debes dejar las flores, como símbolo de que, todo aquello que se va, vuelve en algún momento, si así lo eliges, convertido en belleza. Puedes hacer una ligera caminata en el espacio, antes de volver a casa.

No descartes acudir con un Psicoterapeuta o un Tanatólogo de confianza. Desde mi punto de vista, algunos de los casos que estamos transitando, se deben a duelos no sanados del pasado. Atiéndete. Eso es amor.

¡Gracias por sanar ! ¡Si sana uno, sanamos todos!

De Georgina Illien Corona

Si quieres compartir esta reflexión:

You Might Also Like

error: El Tren de la Vida