EL OLOR A MI MADRE
Estoy convencido que lo primero que sientes al nacer es el olor a tu madre, y ese olor te persigue de por vida, se graba, no sé si en una parte del cerebro o del corazón, pero ahí queda de por vida.
Mi primer recuerdo es acurrucados, los dos, en mi pequeña cama, cuando tenía miedo y la llamaba en la mitad de la noche, y ella me abrazaba hasta que la pesadilla pasaba y hacía marchar al monstruo que se escondía en el armario, entonces yo la olía, profundamente, con los ojos cerrados y eso me daba paz.
También cuando curaba las heridas de mis rodillas, ella, en cuclillas, soplaba mientras pasaba el algodón impregnado en agua oxigenada, y yo me acercaba con los ojos cerrados a oler su cabello, y eso me curaba.
No sé en qué momento, creo que fue cuando crecí tanto que le sacaba dos cabezas, entonces comencé a besarla en la frente, cerraba los ojos y olía su pelo.
El día de mi boda, baile con ella, no recuerdo la canción, solo recuerdo el olor de su cabello, cerré los ojos y se apoderó de mí, los miedos, las heridas de las rodillas, los besos en la frente.
Con solo cerrar los ojos me viene su recuerdo, su olor y me da paz.
Grabado de por vida, el primer sentido y seguro que el último.
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Aún recuerdo el día que naciste y te pusieron sobre mi pecho. El olor de vida de tu cuerpecito, ese olor me ha perseguido de por vida, grabado en lo más profundo de mi corazón.
Recuerdo como me acurrucaba en tu pequeña cama cada vez que me llamabas en mitad de la noche, cuando creías que había monstruos en tu armario y me quedaba abrazándote, entonces olía profundamente tu cuerpecito, cerrando los ojos y eso me llenaba de amor.
Las veces que llegabas llorando con las rodillas destrozadas por las caídas de la bicicleta, entonces yo te soplaba y te besaba las heridas, cerraba los ojos y olía tu piel, y eso me llenaba de amor.
Creciste tanto que llegaste a sacarme dos cabezas, entonces para besarte tenía que ponerme de puntillas y tú me besabas en la frente, yo cerraba los ojos, te olía y eso me llenaba de amor.
Hoy bailando contigo no recuerdo ni la canción, solo cerré los ojos y te volví a oler como el primer día, para mi nada ha cambiado, tus miedos, tu dolor los hice míos. Y eso me llena de amor.
Grabado de por vida, la primera vez que te vi y seguro que la última.
Autor: Desconocido.
