TAREAS PARA LA NAVIDAD
Agradezcamos a Dios por habernos regalado la vida, una familia y amigos para compartirla. Por ello , bendito sea.
Busquemos y trabajemos por el bien común dejando de lado los
intereses personales, abriendo el corazón a nuestros semejantes.
Corrijamos con esmero, bondad, y ternura a aquel que se equivoca, pero ante todo corrijamonos a nosotros mismos.
Demos, sin reservas lo mejor que atesoran nuestra alma y nuestro corazón, sin mirar a quien se lo damos, sólo esmenester saber que lo necesita.
Estimulemos las aptitudes y capacidades de los demás que percibamos disminuidas , para que haga un adecuado uso de ellas.
Felicitemos y seamos felices con cada pequeño logro que lleve a las personas a reconocer sus capacidades y sus valores.
Ganemos la confianza de los demás como una forma de acercamiento y ayuda, compartiendo sus preocupaciones sintiéndolas como propias.
Hagamos nuestras las virtudes de aquellos que son capaces de ser sinceros, valientes y respetuosos.
Intercedamos ante Dios, por nuestros semejantes e intentemos guiar a quien lo requiera hacia el camino que nos lleva a Jesús.
Juzguemos, si lo estimamos conveniente, la verdadera esencia humana y no a las personas por lo que son, por lo que tienen o por lo que aparentan ser o tener.
Limitemos nuestros deseos personales y demos prioridad a los de nuestros semejantes.
Llenémonos de todo lo que nos acerque a Dios y ayunemos de todo lo que nos aleje de ÉL.
Mostremos respeto por las opiniones ajenas y tratemos de logar entendimiento frente a los conflictos que a diario se presentan..
Nademos en las aguas cristalinas del amor y la humildad para reconocer y valorar cuando necesitamos del apoyo de nuestros seres queridos, sea familia o sean amigos.
Observemonos y confiemos en nosotros mismos, actuemos con corrección, sirvamos de espejos a quienes nos rodean
Proyectemos nuestros sentimientos humanitarios hacia las personas más desposeídas no sólo de bienes materiales sino de amor y solidaridad.
Respetemos a todos los seres vivos, incluyendo la Madre Tierra, la Naturaleza, el ser humano, los animales, todo lo que tenga vida en este bello planeta.
Saquemos fuerzas de flaqueza para tender un puente de advenimiento y amistad con quienes nos hayan herido, extendamos primero la mano, cojamos la otra y pidamos disculpas si el caso lo amerita.
Toquemos con la varita mágica del amor el espejo de nuestra alma, para aceptar lo que no nos agrada en los demás, teniendo en cuenta que aquello que criticamos es lo mismo que poseemos.
Unamos con una lazo de amor a todos para construir una lugar de amor, fraternidad, hermandad y paz donde vivir.
Valoremos el esfuerzo, la tenacidad, la entrega de cada uno en pos de la consecución de sus metas, puede que algunos lleguen antes, otros después , pero eso no indica que sean inferiores a los primeros.
Que Dios les bendiga, guarde con bien y llene vuestras almas con la esperanza de un Re- Nacer a la vida con Jesús en nuestros corazones.
