A mi hija:
No te quiero débil,
llorando por los rincones,
¡Te quiero fuerte!
No te quiero tan princesa,
de esas que no mueven ni un dedo,
pendientes sólo del manicure,
encerrada en tu castillo,
¡Te quiero mujer!
VALIENTE,
que dia a dia sale a partirse la vida
¡Que sufre si!
Que lleva dolor,
pero con mucho coraje lo esconde tras una sonrisa.
No te quiero amargada,
quejandote todo el día,
¡Te quiero feliz!
Luchando contra la adversidad,
positiva,
construyendo con tus manos tu propio palacio,
¡Digna!
Una dama…
No te quiero presa,
callada,
sumisa,
¡Te quiero libre!
Diciendo lo que sientes,
gritando para que te oigan,
¡Te prefiero loca!
Riendote de la vida,
bailando con ella,
¡Que se entere quién eres!
No te quiero reina,
¡Eso ya lo eres!
¡Te quiero bruja!
Ruda,
peleando por tus sueños,
asustando al mundo al verte volar,
¡Con alas o sin alas!
Pero siempre decidida,
dispuesta a pelear por lo que es tuyo.
Tomando el timón de tu barco,
aunque no sepas navegar,
¡Asi te quiero!
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